En estas últimas semanas nos hemos enterado de que un miembro de la policía boliviana ha asesinado a una mujer, es decir ha cometido un feminicidio flagrante y según parece en complicidad con otras dos personas.

Nos han acostumbrado a hablar de la violencia de género enfocada como un espectáculo circense y no como una forma de opresión que es el resultado de dos tipos de violencia: la estructural y la cultural.

Es bueno analizar la violencia estructural que afecta a todos y todas y que ocasiona graves efectos, pues se encarga de reprimir nuestros derechos provocando ignorancia, pobreza, tristeza y limita directamente la capacidad de desarrollo de las personas. Así podemos decir que los derechos como acceso a la vivienda, a servicios básicos, a la educación, a la salud, al trabajo digno, a la paz y tranquilidad, están limitados y es el Estado quien tendría que garantizar los mismos.

Por otra parte, la violencia cultural, es decir los mitos, las creencias formadas o creadas a lo largo de siglos a través de diferentes espacios y momentos, ha construido el racismo y el machismo, es decir un sistema patriarcal y colonial, entendido como la existencia de actitudes que se tienen en una cultura donde se cree que los hombres valen más que las mujeres y l@s blanc@s más que el resto.

Por lo expresado, se ve que la prensa a través de sus noticieros, sólo nos muestra la violencia directa contra las mujeres ya que con ello se perpetúa el status quo y de esta forma se evita que las mujeres rompan las bases materiales, simbólicas e ideológicas de la cultura dominante, de ahí que la lucha contra la violencia hacia las mujeres tiene que estar ligada a la búsqueda de una sociedad antipatriarcal, anticolonial y anticapitalista. Esta última además es la que nos tiene sometidas a la pobreza.

En ese sentido el incremento de casos de violencia en épocas de pandemia como esta, donde se ha agudizado la pobreza y la violencia de parte de las instituciones estatales, también se han incrementado los casos de violencia de género y feminicidios.

Por esta razón es imperiosa la necesidad de contar con un gobierno electo y legítimo que construya una sociedad con justicia social para que el Estado contribuya a satisfacer las necesidades de la población en su conjunto rompiendo los privilegios de unos cuantos, sólo así se podrá ir reduciendo TODO tipo de violencia

Célula Cochabamba Movimiento Guevarista