Durante doce años la misión médica cubana en Bolivia contó con la labor de cientos de especialistas. Para brindarles una decuada atención a esas personas, Cuba erigió la “Clínica del Colaborador” en la ciudad de La Paz, equipada con tecnología de punta, acorde a la excelencia de las prácticas de salud que desarrolla ese país.

Hace pocos días el establecimiento fue asaltado y allanado por funcionarios del gobierno de facto boliviano. La agresión fue encabezada por dos ministros que se han destacado por las numerosas violaciones a derechos humanos que han perpetrado desde el golpe de Estado de noviembre de 2019.

El atraco fue ejecutado como espectáculo mediático, con la excusa de la preocupación gubernamental por el avance del COVID-19 y la posibilidad de utilizar dicha clínica para combatir la pandemia. Se trata de un argumento falaz, ya que a estas alturas resulta evidente la ineptitud, incompetencia, incapacidad de gestión y negligencia criminal del gobierno de facto con relación a la pandemia.

Por lo tanto,

• Condenamos este hecho, que se suma a otros contra Cuba, en complicidad con las órdenes que el gobierno de facto de Bolivia recibe desde el Departamento de Estado de los EEUU.
• Denunciamos la conducta repugnante de los ministros involucrados.
• Recordamos a la opinión pública que la propiedad de dicha clínica pertenece al Estado cubano.
• Valoramos la actitud y respuesta de la Cancillería de Cuba, en sintonía con una postura ética digna y solidaria (ver http://www.minrex.gob.cu/es/cuba-pone-disposicion-del-pueblo-boliviano-su-clinica-en-la-paz ).