La Iglesia Católica abrió el camino a un gobierno ilegal
La Iglesia Católica, así como el propio Carlos Mesa y el político fracasado Jorge Tuto Quiroga, fueron quienes finalmente decidieron para que Añez asuma la presidencia del gobierno de facto en 2019. Esa revelación surge de una interesante entrevista de Teresa Morales con el matutino La Razón y que nos confirma hasta donde la participación de la Iglesia Católica es de lo más sorprendente y condenable.
A presión de cívicos, dirigentes políticos y del propio CONADE de Albarracín y sus amigos, surgió la necesidad de sumar a la Iglesia en las decisiones que se tomaron entre el 11 y 12 de noviembre de 2019, claro que en este escenario no se metió para nada el Cardenal Toribio Ticona.
Llamó poderosamente la atención que el obispo Eugenio Scarpellini (que ya falleció) paró más de una vez a Adriana Salvatierra diciendo que él era quien presidía esas reuniones, cuando en la Universidad Católica el clero, políticos de oposición y algunos asesores definieron la proclamación de Jeanine Áñez.
Se dice que el obispo habló fuerte hasta que, un par de veces, le dijo a Adriana que quien presidía la reunión era él, no Adriana. La tarde del lunes 11 de noviembre de 2019, un día después de la renuncia de Evo Morales obligada por una crisis política a raíz de las fallidas elecciones, un motín policial y la “sugerencia” de dimisión de las Fuerzas Armadas, Teresa Morales y Salvatierra llegaron a la UCB para asistir a la búsqueda de una solución al conflicto.
La Iglesia en Bolivia tiene una larga historia de diferenciación del común de los mortales, como se ha repetido en varias oportunidades, la Iglesia se autonombra la “portadora de la luz”, que debe abrir las mentes de los ¿salvajes? porque llegaron, se establecieron y se multiplicaron con ese pretexto, hasta que fuimos reconocidos como portadores de alma.
Pero hoy esa raíz colonial se manifiesta y aclara las diferencias entre un Toribio Ticona (indígena) y la flor y nata de una Iglesia conservadora representada por los Obispos de rancio pedigree. ¿Alguien decía algo sobre las opiniones personales de Julio Terrazas o de Sergio Gualberti, aliados a la oligarquía cruceña?
En uno de sus mensajes el Papa Francisco, sentenció: “hagan lío” y eso es lo que intentó hace un par de años el Cardenal, sacudiendo el anquilosado cuerpo de una Iglesia que a todas luces se encuentra decadente y poco “aggiornada”, como recomendó otro sacerdote de una orden religiosa.
En las décadas del 70 hasta el 90 durante el Plan Cóndor, las bases de la Iglesia apoyaron los movimientos anti dictatoriales de los pueblos, y la lucha emancipadora (Teología de la Liberación) de ahí surgieron sacerdotes comprometidos que, arriesgando su vida, fueron asesinados como Luis Espinal, Oscar A. Romero, Camilo Torres, Enrique Angelelli y tantos otros.
En cambio en la época neoliberal las cúpulas de la Iglesia Católica se arrimaron a las élites políticas, aunque sus bases apoyaron proceso de formación de líderes y reivindicaciones sobre el empoderamiento de sectores marginados, sin embargo, en los procesos progresistas de América Latina de la década del 2000, las cúpulas se mantuvieron al lado de los neoliberales y se produce una crisis en la base de la Iglesia.
Hoy la Iglesia más allá de sus extravíos ideológicos, de apoyar a gobiernos golpistas como el de Añez y Murillo atraviesa dos problemas, su posición anticuada respecto a los problemas sociales como el aborto, sexualidad, etc. pero además su actitud conservadora respecto a los procesos políticos latinoamericanos.
La Iglesia Católica, sobretodo su jerarquía, cada vez se parece menos al Jesús histórico, y no sólo porque maneja un doble discurso y una doble moral, además porque no son el mejor ejemplo de austeridad, porque tienen joyas, oro y hasta bancos en el Vaticano. ¿Será que la cúpula eclesial al mando del obispo Centellas sigue dando línea a un sector ultra conservador que conspira abiertamente contra el gobierno y actúa como partido político?
¿Se imagina usted a un Sergio Gualberti (obispo de Santa Cruz) o el mismo Ricardo Centellas (Presidente de la CEB) a Jesús de Nazaret pidiendo pruebas de la existencia de injusticias sociales? ¿Sera por ello que le debemos tener cuidado a estos porque siempre estarán hablando en nombre de los poderosos?
Finalmente, lo que se confirma es que, una cúpula eclesial que pregona en sus sermones la fraternidad, la solidaridad y el respeto a los derechos humanos, hizo pacto abierto con los que llegaron al gobierno de facto, es más, le ayudaron a consolidarse, defendieron y defienden a sus actores y hasta piden que se “haga justicia” por su jefa golpista que tomó la Biblia en el palacio y ordenó masacrar a un pueblo desarmado.
*Camilo Katari, es escritor e historiador potosino