Johannesburgo, 24 de agosto de 2023

Agradezco al presidente Cyril Ramaphosa la gentil invitación a este foro y expreso mi saludo a todos los presidentes, dignatarios y personalidades presentes.

Hoy, aquí, en el continente africano, los bolivianos nos sentimos en casa, entre hermanos, pues compartimos con los países africanos una misma historia de luchas populares contra el colonialismo, la servidumbre y la explotación de nuestros pueblos y nuestros recursos naturales. Los movimientos de liberación lucharon durante los primeros años del siglo XIX hasta entrado el siglo XX para culminar con nuestras respectivas independencias nacionales. Tenemos más de un siglo de incansables batallas por fortalecer nuestros estados nacionales y hoy somos pueblos heroicos que seguimos luchando no solo por nuestra independencia política, sino también buscamos nuestra independencia económica, científica y cultural, acorde a la nueva realidad mundial.

Tampoco olvidar que, como parte del nefasto proceso de colonización europea en América, miles de africanos fueron traídos por la fuerza para trabajar como esclavos en las plantaciones, minas o en las haciendas, generalmente en condiciones infrahumanas. ¡La sangre africana corre por nuestras venas nuestroamericanas, la sangre africana también abonó nuestras luchas libertarias!.

En memoria de todos aquellos que dieron sus vidas por la libertad, de la que hoy gozan nuestros pueblos, quiero rendir homenaje a dos insignes patriotas africanos, y mediante ellos a todos los pueblos de este continente: a Nelson Mandela padre de la independencia de Sudáfrica y Patrice Lumumba, héroe nacional y primer ministro de la República Democrática del Congo, derrocado y asesinado por la infamia de los intereses imperialistas y colonialistas, en septiembre de 1960.

¡El inmenso valor y convicción anticolonialista de todos nuestros héroes jamás podrán ser borrados de la memoria colectiva y se convierten hoy en la base moral de la resistencia de nuestros pueblos al neocolonialismo que pretende destrozar los crecientes lazos de cooperación entre nuestros continentes y regiones que se acercan cada vez más para afrontar a los retos y desafíos de un mundo multipolar en configuración!.

Los problemas del Sur Global no los va a resolver el Norte hegemónico; un Norte acostumbrado a siglos de dominación de nuestros estados nacionales, expoliación de recursos naturales y explotación de nuestros compatriotas. Los problemas del Sur Global tenemos que encararlos y resolverlos nosotros mismos, juntos, con solidaridad y cooperación auténtica para el Vivir Bien de nuestros pueblos.

Por eso, la emergencia y expansión del grupo de los BRICS es un nuevo hito en la historia humana, porque permite a las naciones acceder a mercados internacionales sin la necesidad de tener que comprometer su dignidad y sin condicionamientos políticos, sin sanciones ni intimidaciones militaristas. Bolivia comparte con los cinco países que integran los BRICS una visión común respecto a un orden internacional fundado en la igualdad, la complementariedad, la solidaridad, la inclusión, el consenso, la cooperación mutuamente beneficiosa, el respeto a la soberanía y la autodeterminación de los pueblos en el marco del multilateralismo horizontal; buscando que la presencia y los intereses de las economías emergentes jueguen un rol decisivo en el escenario internacional.

Los BRICS tiene cada vez una mayor gravitación económica, en un mundo en pleno cambio hacia la multipolaridad. Una preponderancia basada en una economía real con fundamentos sólidos asentados en la producción y la industrialización con respeto a la naturaleza y a la Madre Tierra. Bolivia quiere formar parte de estos cambios. Bolivia tiene su propio modelo económico que ha permitido generar excedentes que son redistribuidos a la población habiendo logrado disminuir los índices de pobreza y desigualdad entre ricos y pobres. La diversificación de la economía, la industrialización con sustitución de importaciones, la producción y exportación de alimentos y productos industrializados, la consolidación de una economía de base ancha y la redistribución social del excedente económico son los objetivos del Modelo Económico, Social, Comunitario y Productivo de Bolivia, que nos permite avanzar hacia una industrialización acelerada y hacia un sistema de comercio multilateral, abierto, complementario, transparente, inclusivo y no discriminatorio.

Aunque Bolivia es un país de ingresos medios y de una economía en desarrollo, ha conseguido mantener un constante crecimiento y una estabilidad económica con justicia social significativa en nuestra región. Creemos, firmemente, que la incorporación de Bolivia a los BRICS sería mutuamente beneficiosa por la concurrencia en áreas estratégicas como la energía, los recursos naturales, la agricultura, la producción de alimentos para la exportación, la ciencia y la tecnología, así como nuevos enfoques de cooperación, financiamiento e inversiones estratégicas en infraestructuras críticas para la integración, dada la privilegiada posición geográfica de Bolivia.

Con las mayores reservas de litio del mundo, Bolivia confía en encontrar socios estratégicos con el objetivo de obtener tecnología y financiamiento necesarios para la industrialización soberana del litio, así como para garantizar mercados para los productos bolivianos con valor agregado. No vamos a permitir que se repita la triste historia boliviana con la plata y el estaño, imborrables cicatrices de pobreza de nuestros mineros y de todo el pueblo. El litio boliviano no puede correr la misma suerte que la plata explotada en la colonia, la goma o el estaño, que se expolio de nuestro territorio como materia prima y que nos dejó en la pobreza.

Igual que paso con el uranio en Níger, con el cobalto en la hermana República del Congo y con otros tantos otros recursos naturales expoliados durante siglos de los países africanos y nuestro americanos. El aseguramiento de cadenas de suministros de recursos energéticos y minerales y metales críticos no puede continuar siendo un pretexto para el intervencionismo y la expansión colonial. Deploramos cualquier intervención militar extranjera en África, en Nuestra América y en cualquier parte del mundo, y apelamos al respeto de la soberanía de los estados, a la autodeterminación y a las instituciones de integración regional y continental. Cualquier conflicto tiene que resolverse respetando los principios de no injerencia, diálogo y entendimiento mutuo establecidos en la Carta de las Naciones Unidas.

Si bien la herencia colonial y racista dejó terribles secuelas en nuestros países, también está históricamente comprobado que nuestros pueblos han sabido salir adelante y prosperar, impulsados por la convicción y los sueños de nuestras gestas libertarias. Por eso, nuestra Revolución Democrática y Cultural dignifica a todas las bolivianas y bolivianos rechazando toda forma de imperialismo y explotación neocolonial.

En poco tiempo más, en 2025, Bolivia celebrará sus 200 años de independencia, más comprometida que nunca con la integración sudamericana, del Caribe y del Sur Global. Quiero aprovechar esta ocasión para invitar a los países del BRICS, así como a los países de América Latina, África y del mundo a que nos acompañen a celebrar el Bicentenario de Bolivia, en el camino a su segunda y definitiva independencia, con plena soberanía económica y política. Están ustedes invitados a compartir los 200 años de libertad del pueblo boliviano

Muchas gracias.